Sala de Prensa
Entrevista al Presidente de la Asociación de Empresas de la Construcción y Promotores de Menorca, D. José Olives Pons
¿Cómo surgió su vinculación con la Asociación de Empresas de la Construcción y Promotores de Menorca?
La verdad es que puedo decir que la he visto nacer, en el año 1984 fueron cuatro constructores de Ciutadella quienes la constituyeron, entre los que se encontraba mi padre, Bartolomé Olives Orpi.
Por aquel entonces yo ya trabajaba en la empresa familiar y por tanto puede seguir muy de cerca sus inicios.
Además mi padre fue el primer presidente de la Asociación, ostentando dicho cargo del 84 al 95.
¿Cómo valorarías la situación actual del sector de la construcción, teniendo en consideración los difíciles años que habéis vivido?
Como muy bien indicas hemos atravesado unos años muy difíciles, en los cuales muchas empresas de nuestro sector han desaparecido y el resto se han visto obligadas a adecuar su estructura a la realidad.
Actualmente el sector está evolucionando positivamente pero siempre tenemos que tener presente que partimos de unos mínimos.
Con ello que quiero decir, pues que a raíz de esta restructuración del sector a la que nos vimos obligados y que principalmente afectó al número de asalariados, nuestras empresas ahora tienen suficiente trabajo para sobrevivir, pero que el trabajo actual no sería suficiente si las empresas mantuviéramos las dimensiones de años atrás.
Es importante que al analizar los datos ofrecidos por las administraciones públicas, los cuales en estos momentos son positivos, a título de ejemplo los ofrecidos en cuanto a número de contrataciones en el sector, tengamos presente la reflexión anterior.
¿Cuáles diría que son los principales problemas que afectan al sector de la construcción en Menorca?
El principal problema que nos afecta, nos ha afectado y creo que no me equivoco cuando digo que nos seguirá afectando es la inseguridad jurídica.
El gran abanico de normativas, la mayoría de las cuales dejan vía libre a la interpretación, nos afectan muy negativamente. No es lógico que una normativa se aplique de una manera u otra según la administración de que se trate o según el técnico que la interpreta.
Tanto el mercado inversor como el propio sector de la construcción necesitamos seguridad, y por tanto la incertidumbre no es buena compañera.
Otros problemas a destacar son la gran burocracia que ralentiza nuestro trabajo, el continuo cambio de normativas y la falta de personal cualificado.
Existen varios temas a los que todavía no nos hemos referido explícitamente y que creo que esta entrevista no estaría completa sin ellos, como son la revisión del Plan Territorial Insular de Menorca y la lentitud de la administración en la concesión de licencias de obras. ¿Qué destacarías de ambos?
En cuanto a la revisión del PTI me gustaría en primer lugar hace una reflexión cronológica de este documento. Del PTI aprobado en el año 2003, nuestra Asociación ya destacó en multitud de ocasiones su carácter restringido, el cual se caracterizaba por prohibir, limitar y dificultar la actividad económica en Menorca y por tanto difícilmente podría cumplirse el objetivo final del PTI que era el logar un modelo económico en el que convivan de forma ordenada el desarrollo local y económica de la sociedad menorquina con un respecto con el medio ambiente.
Cuando se aprobó la Norma Territorial Transitoria, desde el sector aplaudimos su contenido, en el cual se posibilitaba en mayor medida el ejercicio de nuestra actividad, y ello quedo demostrado con los proyectos que a raíz de esta pudieron ser desarrollados.
Cuando se procedió a la derogación de la mayoría de artículos de la NTT, nuestro sector junto con otros siete colectivos relacionados con el sector de la construcción interpusimos de primer momento un recurso contencioso administrativo, el cual fue desestimado y después un recurso de casación qué no fue admitido a trámite.
Todo ello nos desilusionó y por ello ahora que se está trabajando en la revisión del PTI, hemos considerado de suma importancia participar en la misma, exponiendo nuestras sugerencias y propuestas tal y como ya hicimos en una primera reunión que mantuvimos con el Consell Insular el pasado 12 de febrero.
Entre los principales puntos que defendemos destacaría: claridad absoluta en el articulado del PTI, no dando lugar a diferentes interpretaciones; se fomente la reconstrucción y mejora de las edificaciones, evitando cualquier traba que dificulte el trabajo diario de todo un sector, así como se posibilite de forma controlada las ampliaciones de las construcciones existentes en suelo rustico; modificar la clasificación de las diferentes modalidades de obras que se establecen en el PTI, en el cual se asemeja la obra de “nueva planta” a la “reconstrucción, sustitución y ampliación”, cuando en verdad estas tres tipologías encajan mucho mejor en la definición de “obras en edificios”; en suelo rustico permitir el cambio de uso de las edificaciones existentes y permitirse excepciones en cuanto a la prohibición del uso residencial; el no estar de acuerdo con la necesidad de reservar el 50% de las plazas residenciales a plazas de protección, dado que la legislación vigente lo establece en un 30%; revisar las cifras dadas en el PTI en cuanto a plazas residenciales en cada una de las poblaciones de Menorca así como a la densidad bruta de vivienda por hectárea que por ejemplo en el caso de Ciutadella no se podrá cumplir, entre otros asuntos.
En cuanto a la tardanza en la concesión de las licencias de obras, yo mismo participé recientemente en una mesa redonda en la que se abordó este asunto y sobre el que desatacaría la necesidad de simplificar los filtros, que los arquitectos no crucen la línea roja al presentar los proyectos, que sean claros para que no surjan diferentes interpretaciones por parte de los técnicos que tienen que informar.
Es necesario que dialoguen entre ellos para agilizar el proceso y que las distintas administraciones aprovechen los recursos que tienen y que simplifiquen mejor para obtener un mayor rendimiento.
Ya para finalizar, ¿existe algún otro tema que desees comentarnos? ¿Cómo ves el futuro del sector de la construcción en Menorca?
El futuro es siempre incierto. Nos movemos por los altibajos de los mercados y el efecto es mayor estando en una isla. Todos sabemos que hay que preservar el territorio de Menorca, pero tenemos que poder convivir en ella, crecer donde se pueda y mejorar lo que ya está hecho. No todos los menorquines tenemos el trabajo asegurado y los gobernantes deben ser conscientes de ello. Cada día se están destruyendo muchos puesto de trabajo por culpa de la burocracia administrativa, trabas y normativa, junto con el “si pero no” por costumbre.