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En la época estival, las condiciones climáticas a las que se encuentran expuestos las personas trabajadores, así como los autónomos, pueden desembocar en accidentes laborales, alguno de ellos incluso mortales. La exposición a temperaturas excesivas pueden provocar deshidratación, síncopes, agotamiento, o un golpe de calor.

La causa del problema no es sólo una elevada temperatura, sino la acumulación excesiva de calor en el organismo, que se puede producir tanto por las altas temperaturas, como por el calor que genera el cuerpo en actividades físicas intensas.

¿Qué es el golpe de calor?

El golpe de calor se produce cuando una persona está sometida a temperaturas ambientales muy altas o por el calor que genera su cuerpo al realizar actividades físicas intensas y su temperatura corporal sube de forma exagerada. Cómo consecuencia se produce una alteración en el funcionamiento de diferentes órganos pudiendo provocar un fallo multiorgánico y la muerte.

El estrés térmico por calor resulta especialmente peligros en trabajos al aire libre, como la construcció, la agricultura, repartidores, etc.

La exposición al calor puede causar diversos efectos sobre la salud, de diferente gravedad, tales como erupción en la piel, calmbres musculares, deshidratación, agotamiento, etc, pero el más grave es el golpe de calor. Cuando éste se produce, la temperatura corporal supera los 40,6º C, siendo mortal entre el 15% y el 25% de los casos.

¿Cuáles son los principales factores de riesgo?

Factores climáticos:

• Exposición a temperaturas y humedades relativamente altas.
• Ventilación excasa.
• Exposición directa a los rayos de sol.

Factores relacionados con el tipo de tarea.

• Dificultad de proporcionar agua fresca.
• Realizar trabajo físico intenso.
• Pausas de recuperación insuficientes. Es preferible descansar cada hora. A medida que la temperatura es mayor, las pausas deben ser más largas y frecuentes.

Factores individuales.

• Pérdida de aclimatación. La aclimatación se consigue en 7-15 días, pero desaparece en tan sólo una semana.
• Vestimenta oscura, gruesa.
• Condición física. La falta de entrenamiento en la realización de tareas físicas intensas constituye un factor de riesgo.
• Existencia de antecedentes médicos: enfermedades del sistema cardiovascular, de las vías respiratorias, diabetes o insuficiencia renal.
• Ingesta de determinados medicamentos: antihistamínicos, diuréticos o antidepresivos.
• Consumo de sustancias tóxicas (alcohol, drogas).
• Sobrepeso.
• Edad avanzada. Las personas mayores presentan más riesgo de deshidratación.

¿Cómo actuar ante un golpe de calor?

Ante un caso de golpe de calor, hay que avisar inmediatamente a los servicios de urgencias (112) y mientras se espera a que lleguen los servicios médicos:

• Llevar a la persona a un lugar fresco y en posición semisentada para favorecer la respiración.
• Si el trabajador está consciente, procurar que beba agua a pequeños sorbos.
• Para reducir la temperatura corporal, retirar la ropa, dar aire con un abanico o ventilador y utilizar paños con agua fría en la frente, la nuca y el cuello. Si existe la opción, cubrirlo con toallas húmedas.
• Si no se recupera o pierde el conocimiento, hay que tumbarla en posición recostado sobre un lateral de su cuerpo, con la cabeza ligeramente ladeada y las piernas flexionadas, a la espera de que llegue el servicio sanitario.

Síntomas de un golpe de calor:

• Elevación de la temperatura corporal alcanzando e, incluso, superando los 40º C.
• Piel caliente, roja y seca, además de dolor de cabeza intenso.
• Fatiga, hiperventilación, náuseas, vómitos o diarrea.
• Alteración del estado mental, convulsiones, delirio, incluso coma.
• La primera manifestación puede ser la pérdida del conocimiento.

¿Cuáles son las claves para evitar un golpe de calor?

• Aclimatarse al calor de forma paulatina/poco a poco.
• Planificar el trabajo para evitar o disminuir la exposición durante las horas centrales del día.
• Habilitar zonas de descanso con sombra y realizar pausas con mayor frecuencia.
• Adaptar el ritmo de trabajo.
• Hidratarse constantemente.
• Vestir ropa holgada y transpirable.
• Cubrirse la cabeza y proteger los ojos usando gafas y sombrero.
• Aplicación de protector solar y renovarla frecuentemente.
• Evitar el trabajo en solitario.
• LLamar a emergencias ante la sospecha de golpe de calor.

Medidas- Empresa

• Formar e informar a las personas trabajadoras sobre los riesgos, efectos, medidas preventivas, y aplicación de primeros auxilios frente a los golpes de calor.
• Disponer de locales que permitan a la plantilla descansar cuando resulte necesario.
• Informar a la plantilla que beban agua con frecuencia, así como fomentar la ingesta de frutas, verduras y bebidas tipo gazpacho.
• Los lugares de trabajo deben disponer de agua potable suficiente.
• Disminuir la temperatura en interiores empleando ventilación natural, ventiladores o aires acondicionados.
• Organizar el trabajo cuando resulte posible: Aquellas actividades que requieran mayor esfuerzo físico se realicen durante las horas menos calurosas.
• Garantizar una vigilancia de salud adecuada, en especial a los trabajadores que tengan problemas respiratorios, renales, diabetes, cardiovasculares, etc. y que son más sensibles a los efectos de estrés térmico.

Medidas- Trabajador

• Realizar pausas, descansando en lugares frescos y a la sombra.
• Beber frecuentemente agua o bebidas isotónicas.
• Evitar beber alcohol o cafeina, ya que deshidratan los cuerpos.
• Evitar las comidas calientes o pesadas. 
• Consumir frecuentemente frutas y verduras.
• Evitar las exposición directa de la piel al sol. Utilizar ropa ligera, que sean permeables al aire, de tejidos claros.
• Proteger la cabeza con gorras, o sombreros.
• Utilizar cremas solares.